World Monuments Fundation

Roberto Hernández Ramírez

“Si no protegemos la evidencia tangible de esta historia de la cultura, como se captura en el legado arquitectónico, se corre el riesgo de perder activos invaluables, que a la vez que techos para la comunidad, son fuente de inspiración moral para los pueblos”. RHR.

Los edificios históricos son la evidencia tangible de la historia de la cultura con la que se construye la identidad de una sociedad. Bajo esta premisa World Monuments Fund y Roberto Hernández Ramírez a través de Fomento Cultural Banamex, fortalecen un importante trabajo para la preservación del legado arquitectónico en México.

Desde su fundación en 1965, la WMF se involucró en más de 400 proyectos alrededor del mundo. En la última década, un gran número de proyectos apoyados por la organización se han concentrado en la herencia cultural de sitios en México. Esto es debido en parte a que las instituciones mexicanas y las organizaciones sin fines de lucro han respondido de manera entusiasta a las listas de sitios en peligro publicada cada dos años, fruto de una auditoría muy minuciosa que se lleva a cabo desde 1996.

La importancia de preservar la herencia cultural es tan fuerte como entender que las personas y la cultura, son inseparables. Nuestra cultura de hoy es soportada y nutrida por lo que nuestra humanidad ha creado en el tiempo. Esa diversidad y diferencia de lugares y de gente es uno de los principales valores de la civilización.

Los fondos que WMF tiene disponibles para invertir en sociedad con participantes locales – tal es la manera como procede con el apoyo internacional la institución– se ha expandido últimamente para México. “Roberto Hernández Ramírez, a través de Fomento Cultural Banamex, líder en filantropía corporativa, ha sido el socio local mexicano más generoso y activo en el apoyo a la preservación del legado cultural arquitectónico” explica la licenciada Bonnie Burnham, presidente de la institución.

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